Pancho Varona

Blog personal de Pancho Varona.

martes, mayo 15, 2007

Los últimos coletazos


Estamos dando los últimos coletazos antes de empezar a dar coletazos de otro tipo, con otros artistas, en otras plazas.
La verdad es que se le coge cariño a esto del Karaoke, coño, otia, ozú, joé, se le pilla cariño al formato y a la gente que va a vernos; y a las canciones, a las que ya se tenía cariño de antes, se les pilla más cariño todavía.
Yo, ultimamente, estoy encoñado con la versión que hacemos de "Donde habita el olvido". Recuerdo al que no nos haya visto ultimamente o al que no haya oído dicha versión que estamos tocando la primerísima versión que hicimos Antuán y yo de "Donde habita el olvido", la que hicimos durante la grabación de "Esta boca es mía", la roquerita, la siniestra, la preciosísima canción que hicimos entre Martínez, García y yo.
Años más tarde Joaquín decidió hacer una versión de la versión, y salió la que salió en "19 días y 500 noches". A mí me gusta más la que tocamos en el karaoke, pero la otra también me gusta.
Las canciones nacen y toman vida propia. Una vez hechas, pillan su rumbo sin contar con el o los autores. Una vez hechas, dejan de ser tuyas y se vuelven suyas. Unas crecen, otras menguan, otras se ponen más guapas y algunas se vuelven feas. Pero ninguna se queda quieta. Salen disparadas por la puerta de tu casa, por la puerta del estudio y se van andando o cogen un taxi o se quedan en la calle plantadas en una esquina como esperando algo. Pero dejan de ser tuyas. Nunca sabes dónde acabarán porque nunca acaban, son eternas, están siempre ahí, más o menos escondidas pero ahí.
El otro día Darío Manrique (El País) nos hizo una entrevista hermosísima a Antonio y a mí en una cafetería de Tirso de Molina aprovechando que El País va a sacar una movida a propósito de la gira Serrat-Sabina. Y Antonio y yo hablamos y hablamos de canciones, de cómo nacieron; y de cómo crecieron. Precioso. Qué recuerdos, qué pedazo de recuerdos...
Y le contamos lo mal que lo pasamos en "Esta boca es mía" viendo que se quedaba fuera del disco nuestra cancioncita querida. Porque se hicieron pruebas y más pruebas para cambiar cosas en la canción. Cosas que a Joaquín no le convencían. Y grabamos una versión cantada por mí de prueba, y luego otra cantada por Antonio de prueba y luego probaba Jaime Asúa con otra melodía diferente y a Joaquín ninguna le convencía del todo. Y se quedó fuera del disco y del siguiente "Yo, mi, me, contigo" y es un poco frustrante saber que tienes una preciosa canción que se va a quedar ahí.
Pero un día llegó Joaquín y me dijo que la quería grabar en "19 días y 500 noches" e hizo su versión medio acústica y quedó muy bien. Aunque yo siga prefiriendo la que yo tenía en la cabeza. Y me llevé una alegría porque la canción no iba a caer ni en el olvido ni donde habita el olvido. La vida de las canciones. Las canciones tienen vida propia.
A veces se ramifican como en este caso. Dos versiones que la convierten casi en dos canciones diferentes. O como en el caso de "Ojos de gata" de Secretos e "Y nos dieron las 10" de Joaquín. La misma canción pero ramificada.
Otro caso curioso: "Es mentira" era "Contigo" o viceversa. Joaquín me dio la letra de "Contigo" y yo en casita le empecé esa letra con la música de "Es mentira". Probad a cantar "yo no quiero un amor civilizado" con la música de "Es mentira" y lo entenderéis. En vez de "es mentira" tenéis que cantar "yo no quiero" y así sucesivamente.
Pero Joaquín con buen tino nos dijo que creía que esa letra merecía una musiquita más calmadita, más bonita, más baladón...y acertó como siempre o como casi siempre. Pero me dijo "no te preocupes que a esa música le pongo letra mañana mismo" y al día siguiente apareció con la letra de "Es mentira". ¿Es curioso o no? Vaya racha de hacer hermosas canciones, vaya años!
La extraña vida de las canciones. Qué hermosura darle el primer impulso y luego ver cómo tu canción emprende su propio camino. La extraña vida de las canciones. Haceros músicos y componed, hacedme caso. Aprended un poquito de algún instrumento y probad a componer. Es un orgasmo. Bueno, es mejor que un orgasmo porque dura mucho más. Dura toda la vida.
El oficio más hermoso del mundo.

Por favor, no dejéis de escribir!
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